martes, 5 de abril de 2011

NARRATIVA: LA CONQUISTA DE MÉXICO ¿VENTAJA O DESVENTAJA?......

Todo comenzó con las primeras expediciones…. La corona española atravesaba por graves problemas económicos y permitió que se realizaran incursiones a tierras desconocidas. Por azares del destino y para nuestra desgracia, su camino fue dirigido hacia nuestras tierras.
     En ese entonces, los aztecas gobernaban gran parte del territorio que hoy ocupa nuestro país, al frente de este poderío se encontraba el emperador Moctezuma II, considerado casi como un dios sobre esta tierra.
    La profecía decía que Quetzalcóatl regresaría a tierras aztecas y esto representaba un verdadero peligro para Moctezuma según él, porque la situación no estaba del todo bien y la población no dudaría un instante para cambiar de emperador.
     En el territorio que hoy ocupa Cuba, se preparaba una expedición a nuestro territorio, la cual es encomendada a Hernán Cortés, un hombre de 34 años, proveniente de familia noble pero con pocos recursos económicos; ambicioso, astuto y con mucha sed de triunfo. Parte al mando de 11 barcos, acompañado  de 550 españoles, 50 de ellos marineros, 200 auxiliares(nativos de la isla y esclavos negros) armados con lanzas, espadas de acero, armaduras de metal, mosquetes,  cañones de acero y algunos más de latón, así como 16 caballos.
Poco a poco se internan más y más en nuestra tierra sin encontrar mucha resistencia, al contrario, comienzan a hacer alianzas con pueblos sometidos por el gobierno azteca, quienes vendo en estos individuos barbados, una oportunidad para quitarse el yugo al que son sometidos. De esta manera el ejército de Cortés crece cada vez más y los rumores de ello, llegan a oídos de Moctezuma, quien espera con mucho temor la llegada de éstos a su ciudad. Con la intención de frenar su paso, el emperador envía mensajeros cargados de objetos de oro y plata, piedras preciosas, esclavos; sin embargo, produce efectos contrarios a los deseados, la ambición crece en los españoles quienes matan de inmediato a los emisarios y avanzan con mayor brío creyendo encontrar más tesoros tierra adentro.
    La utilización de intérpretes  juega un papel fundamental en este acontecimiento y sobre todo el de la Malintzin, Malinche o Marina, quien se encarga de ser mediadora y traductora de Hernán Cortés a quien sólo le importa llenarse de riquezas y de fama.
     Cuando los nativos de América se enfrentan al ejército de Cortés, miran con terror esa fusión entre animal y persona, que no era otra cosa que los españoles montados en sus caballos; aunado a ello, el que estuvieran cubiertos con armaduras y casco de acero les daba un aspecto más fiero y terrible. Contaban que traían palos que lanzaban fuego y quemaban lo que tocaban, era tanto su poder que incluso podían destruir cerros enteros. Estos temores y falsas creencias fueron determinantes para la derrota de los nuestros, les ganó el miedo desde un principio y por si fuera poco todo ello, el que trajeran consigo la viruela, enfermedad desconocida hasta entonces para los aztecas, quienes nada pudieron hacer al respecto, murieron miles por tal causa.
     Cuando llegan a la ciudad de Tenochtitlán, los españoles quedan maravillados de la magnificencia y perfección de sus construcciones, del gran comercio que en él existe y no dudan un instante en saquear y destruir todo lo que fue levantado con tantos años de esfuerzo, de pisotear las creencias religiosas, de eliminar casi por completo las deidades a las que se rendía culto, de sacrificar con tal de ganar.
¿Ventaja o desventaja? ¿Qué hubiese ocurrido si no hubieran llegado los invasores a nuestra tierra? ¿Cómo sería nuestra vida actualmente? Muchas dudas giran alrededor de ello. Sólo me resta comentar que el imperio azteca tenía una buena organización, que había riqueza y prosperidad, que se contaba con arquitectos de excelente talla, que había una cultura del respeto por la naturaleza, avances significativos en la medicina y la herbolaria, conocimientos en astronomía, física, matemáticas, etc; ¡y de pronto! llega un grupo de invasores a tomar lo que no es suyo, a mancillar, escudándose en una cruz, en su religión…… la mejor opinión la tiene usted……
ALFREDO ROMAN CERECEDO REYES

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